Para entender un poco las estrategias utilizadas por aquellos que intentan introducir la ideología de género en las leyes, es útil conocer el caso de Ontario, Canadá. En el año 2012 se agregaron al “Código de Derechos Humanos de Ontario” expresiones tales como la identidad de género y la expresión de género, dos términos confusos y sin fundamento científico[1]. En el Código se habla de la “orientación sexual” como una “característica personal la cual forma parte de quién uno es”[2]. El código establece que se debe respetar y tomar en consideración “lo que piensa el niño y sus deseos”.[3]
Es importante aclarar que esto incluye la potestad del niño para decidir sobre tratamientos médicos tales como la administración de bloqueadores hormonales, generalmente sucedidas por las operaciones de reasignación de género. Esta misma ley 89 elimina el derecho a la objeción de conciencia y la libertad religiosa dentro de la familia.
Normalmente la gente piensa: “eso jamás pasará en mi país”. Sin embargo, no podemos ser tan ingenuos, pues existe una maquinaria poderosa que opera desde el nivel internacional, que ha ido ganado terreno y experiencia a través de la réplica de sus estrategias país a país. Lo hacen con un objetivo claro, y es el de cambiar las leyes nacionales, introduciendo sus términos subjetivos y eufemísticos, cargados de su ideología.
Esta es la manera en que logran imponer su ideología minoritaria sobre naciones completas, apoyándose de todo un aparato propagandístico que funciona a través de los medios de comunicación y de una diversidad de iniciativas y “proyectos” que sospechosamente empiezan a ser ejecutados por los diferentes ministerios públicos, instituciones educativas y organizaciones no gubernamentales.
Definitivamente, la ideología de género es como un “virus intelectual” que va influyendo en la forma de hablar, en el debate político, en el campo intelectual, en la prensa, en la educación, en los medios de comunicación, en la vida diaria de cada ciudadano.
Por esto, es nuestra responsabilidad como padres, madres, o simplemente como ciudadanos que amamos la familia y la libertad, mantenernos vigilantes, velando por nuestras leyes, para que no sean contaminadas con esta ideología tan perjudicial.
FUENTE PRINCIPAL: Muñoz Iturrieta, Pablo. 2019. Atrapado en el cuerpo equivocado. La ideología de género frente a la ciencia y la filosofía. Editorial Katejón, Buenos Aires.
[1] http://www.ohrc.on.ca/en/ontario-human-rights-code
[2] http://www.ohrc.on.ca/en/code_grounds/sexual_orientation
[3] https://www.ola.org/en/legislative-business/bills/parliament-41/session-2/bill-89
